Esta orden nicaragüense se concede tanto a los nacionales como extranjeros, civiles y militares con el objeto de patentizar su reconocimiento por servicios sobresalientes prestados a la patria o a la Humanidad; por obras de artes o literarias de gran relieve; descubrimientos científicos de trascendencia; hechos y trabajos meritorios; y especialmente como un estímulo a la labor diplomática que en forma apreciable haya contribuido al fortalecimiento de relaciones entre Nicaragua y los demás países.